SEAN BIENVENIDAS TODAS LAS INICIATIVAS QUE SE PROPONEN MEJORAR LA INFORMACIÓN Y DIFUNDIR EL CONOCIMIENTO DE LOS PROBLEMAS CON LA VIVIENDA.

El Consejo Superior de los Colegios de Arquitectos de España (CSCAE) y el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana han presentado recientemente el Atlas Global de Vivienda, como la primera “plataforma de vivienda” "que integrará todos los datos sobre housing que existen en España” y que “permitirá visualizar y cruzar datos de otros países a partir de las seis barreras al acceso a una vivienda digna, adecuada y asequible identificadas en el Foro Internacional Affordable Housing Activation: desajustes, políticas y regulaciones, financiación, diseño y desarrollo urbano, promoción y producción y propiedad y tenencia.”

 

Sin dejar de felicitarnos por estas iniciativas hay que seguir denunciando la insuficiencia de la información  oficial sobre vivienda existente en España. 

 

Como otras plataformas aparecidas recientemente, ésta  se nutre de todos los datos oficiales existentes, pero estos siguen siendo muy escasos, poco actualizados, poco desagregados y no son todo lo adecuados y fiables que debieran para los fines que se persiguen.  Hay que esperar que el aprovechamiento de las muchas posibilidades que ofrecerá el Censo de 2021, permita, a los agentes que participan en el sistema residencial, efectuar por fin diagnósticos precisos y correctos. 

 

En relación con el carácter global de este Atlas y la posibilidad de efectuar comparaciones con otros muchos países, hay que recordar que la complejidad de los respectivos sistemas residenciales obliga a cuestionar seriamente la validez del cruce de indicadores o, incluso, la comparación de políticas aplicadas en contextos  económicos, normativos y sociodemográficos muy diferentes.