lunes, 12 de noviembre de 2012

LA CORRUPCIÓN URBANÍSTICA Y LA CORRUPCIÓN DEL URBANISMO


(publicado  en territoriosostenible2011

Los profesores del Departamento de Geografía de la Universidad de La Laguna Víctor Jerez, Pedro Martín y Ramón Pérez, han publicado recientemente, un artículo titulado "Aproximación a unageografía de la corrupción urbanística en España". Los autores han “medido y analizado algunas de las características principales de la corrupción urbanística municipal en España” a través de noticias aparecidas en la prensa digital entre 2000 y 2008 dando cuenta de 676 “… casos de corrupción o de irregularidades urbanísticas denunciadas por todo tipo de agentes sociales…”
Venimos defendiendo que los problemas derivados de la acción urbanística no son sólo, ni fundamentalmente, consecuencia de acciones punibles que acaban en manos de la Guardia Civil, de la Fiscalía Anticorrupción y de los Tribunales de Justicia, a veces entre protestas y muestras de desagrado de los vecinos que no entienden el porqué del castigo a los infractores. La principal causa de los problemas urbanísticos que padecemos es la corrupción del urbanismo (ver el artículo de F. Gaja ¿Corrupciónurbanística o corrupción del urbanismo?), que, sin necesidad de infringir la legalidad, ha hecho que el planeamiento urbanístico haya dejado de ser una garantía de racionalidad territorial y de defensa del interés general para convertirse en un instrumento al servicio de intereses económicos concretos.
A lo largo del tiempo, y muy especialmente en los últimos quinquenios, los mayores disparates en las propuestas de crecimiento urbano y ordenación territorial están perfectamente acomodados a la ley y han sido  “bendecidos” por el planeamiento. No se trata de pequeñas o grandes “golferías” de agentes locales y concejales corruptos. Estamos ante una perversión del sistema, ante la pasividad de una sociedad que no parece ser consciente de que el territorio es un bien necesario, con valor por sí mismo, limitado y no siempre recuperable, que debe ser utilizado con criterios de racionalidad y que garanticen un desarrollo sostenible. El afán por exprimir todas las plusvalías, construyéndolo todo, no es exclusivo de los que se saltan la ley. Está instalado en todas las administraciones y en el conjunto de la sociedad. No hay más que ver las propuestas de crecimiento de los Planes Generales aprobados por todas y cada una de las diferentes instancias, cualquiera que sea el grupo político que las gobierne.(*)
Como en cualquier otro ámbito de la vida social, de los que infringen la ley ha de encargarse la justicia, pero la responsabilidad de devolver al planeamiento urbanístico su función de velar por un uso racional y sostenible del territorio, por la equidad y la eficiencia económica, por la prevalencia de los intereses colectivos sobre los individuales, corresponde a toda la sociedad, pero muy especialmente a los profesionales del urbanismo y a quienes desde la Academia están obligados a analizar la realidad urbanística y a crear y difundir conocimiento en beneficio del interés general.


viernes, 28 de septiembre de 2012

Las viviendas vacías, un tema recurrente


(Publicado en Territoriosostenible2011

El portal idealista.com ha publicado recientemente un informe titulado ¿cómo cuenta el ine las casas vacías?, cuya lectura recomendamos.
Venimos denunciando que el fenómeno de la vivienda vacía es uno de los agujeros negros del urbanismo y de la economía en España, sobre el que de manera recurrente aparecen estimaciones o simplemente opiniones que contribuyen a hacer aun más borrosa la realidad.
Que no se conozca con la precisión necesaria qué parque de viviendas tenemos y cómo se están utilizando es un déficit de información que impide conocer hasta dónde llega el despilfarro social, económico y territorial que supone la existencia de unos cuantos millones de viviendas –parece que más de seis- sin ninguna utilidad.
La opacidad del parque residencial y del mercado de vivienda que padecemos, es consecuencia de un injustificable desinterés de los poderes políticos y las estrategias manipuladoras de los intereses económicos.
El INE anuncia que publicará datos del Censo de 2011 sobre vivienda en la segunda mitad de 2013 ¿seremos entonces un país capaz de saber algo tan básico como cuántas viviendas tenemos, dónde están, como son y a qué se destinan?

Para ampliar:
Vinuesa, J.(2008). “La vivienda vacía en España: un despilfarro social y territorialinsostenible”

jueves, 28 de junio de 2012

¿Cuántas viviendas se necesitan en España?


(Publicado también en  territoriosostenible2011)


El informe del Consejo Empresarial para la Competitividad, Crecimiento y sostenibilidad de la economía española presentado el pasado 23 mayo 2012 dice:


 “…en el último año se han producido unas 60.000 viviendas, mínimo en la historia reciente, y un 89% inferior al promedio anual entre 2000 y 2007. Este nivel está lejos de la producción de viviendas que requiere la economía en el medio plazo: entre 150 y 250 mil al año, según el rango de estimaciones de formación de hogares para la próxima década” “es importante tener en cuenta que la crisis económica sitúa la formación de hogares por debajo de las tendencias demográficas (en la actualidad el ritmo de formación neta es de 140 mil), pero que estas se recuperan al mejorar en entorno. (“Crecimiento y sostenibilidad de la economía española”, p. 39)


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Cuando el CEC dice que la economía (?) requiere en el medio plazo una producción de viviendas entre 150 y 250 mil al año, y que el ritmo actual es de 140 mil, no indica la procedencia de los datos.

De acuerdo con nuestras estimaciones, realizadas a partir de las últimas Proyecciones de Población  a Corto Plazo del INE, entre 2012 y 2020 las necesidades anuales de vivienda por nuevos hogares se irán reduciendo  de 114.000 a 45.000.

Son datos que reclaman una mayor preocupación por la evolución demográfica y que obligan a reflexionar seriamente sobre la urgente necesidad del cambio de modelo económico si efectivamente se quiere apostar por la sostenibilidad.











lunes, 4 de junio de 2012

Crecimiento del número de hogares en España

 El crecimiento del número de hogares en España apenas exigirá una media de 71.000 nuevas viviendas al año hasta 2021


Tradicionalmente la vivienda se ha visto en términos de mercado especulativo desde las esferas puramente financieras, pero también desde la producción, desde la demanda y, lo que es peor, desde los poderes públicos al frente de las diferentes administraciones. Esta tesis, que hemos defendiendo desde hace años en varios artículos y también desde este Blog, no queda completamente enunciada sin hacer referencia al hecho de que para que se produzca tal comportamiento de los agentes económicos, de los poderes públicos y de la sociedad en su conjunto, es necesario despreciar los principios de sostenibilidad territorial (el territorio sólo es valorado en cuanto que generador de plusvalías) y no querer diferenciar la vivienda-alojamiento de la vivienda-activo-económico. Ésta puede tener una demanda casi ilimitada, siempre que haya financiación y el comprador vea en ella una inversión rentable y con liquidez. La vivienda-alojamiento, sin embargo, está sólo alimentada por el crecimiento del número de hogares. 


El INE realiza anualmente proyecciones de población a 10 años vista y en las de finales de 2010 preveía que la población española llegaría a 47,2 millones en 2020. En las que realizó a finales de 2011 las previsiones para 2021 se reducían a 45,6 millones. A partir de esas estimaciones, unas proyecciones de hogares por el método de la “persona de referencia”, permite calcular que entre 2001 y 2010 el crecimiento medio anual de hogares fue de unos 350.000. Según las proyecciones de 2010, antes de que se produjera el cambio de tendencia migratorio, el crecimiento medio anual de hogares hasta 2020 sería de unos 170.000. 

Pero cualquiera que se interese por la demografía sabe que las migraciones son imprevisibles, incluso reversibles. Así, las últimas proyecciones del INE nos han llevado a estimar que el crecimiento medio de hogares de aquí a 2021 podría suponer unas necesidades de no más de 71.000 nuevas viviendas anuales. 

La falta de criterios territoriales y demográficos en la producción inmobiliaria de los últimos años pueden hacer que haya áreas en las que se necesiten más viviendas, pero, sin entrar en concreciones regionales, con las viviendas que hay actualmente disponibles en manos de bancos, promotoras y particulares (sin mencionar las muchas que no se utilizaban ya antes de “la burbuja”), no haría falta construir una vivienda más en muchos años. 

Estamos ultimando un informe, que próximamente estará en acceso libre en internet, sobre proyecciones de hogares y demanda potencial demográfica de vivienda, en el que se pone de manifiesto el efecto de la dinámica demográfica sobre la drástica contracción de la futura demanda de vivienda. 

Preocupa, y con razón, el stock de viviendas sin vender y se buscan las causas, entre otras, en las condiciones que pone la banca para la concesión de hipotecas, pero quizás sería bueno pensar que si no se venden las viviendas es, sobre todo, porque no hay hogares para tantas viviendas-alojamiento disponibles y porque, al explotar la burbuja, la vivienda-activo-económico ha perdido interés como inversión para la posible demanda.